martes, 9 de febrero de 2010

UROGALLO - Una de las especies peninsulares en mayor riesgo de extinción que precisa de planes urgentes de recuperación


El urogallo (Tetrao urogallus) es una especie de ave galliforme de la familia Phasianidae.
Se distribuye por buena parte de la Europa boreal (Escandinavia, región del Báltico y Rusia.) y en pequeños enclaves de montaña de zonas templadas como la Cornisa Cantábrica, los Pirineos, los Alpes y el Jura.
Biológicamente se la considera una reliquia de la era glaciar,[
cita requerida] pues tras este período la población se fue aislando en Europa a las regiones de alta montaña y o más frías.
En
España y desde 1979 se ha vedado la caza de esta especie, y desde 1986 tiene la catalogación de especie protegida aunque esto no ha supuesto un incremento en la población hasta el momento.
El urogallo tiene un tamaño máximo de 1,10
m en los machos y 0,70 m las hembras. Se caracteriza por tener unas plumas debajo del pico en forma de barba, una cola en forma de abanico y unos tubérculos rojos sobre los ojos.

Vive en zonas montañosas con
bosques claros y abiertos de coníferas donde haya abundante vegetación herbácea, agua y bayas. Suele dormir en las ramas horizontales de los árboles, lo que se hace un requisito para su presencia.

Urogallo

Una de las especies peninsulares en mayor riesgo de extinción que precisa de planes urgentes de recuperación .

El urogallo (Tetrao urogallus) es la mayor de las gallináceas españolas que recibe su nombre por el sonido que emite durante su celo, parecido al del "uro", antepasado salvaje de los bóvidos domésticos. Se trata de una reliquia de la época glacial: Tras la retirada de los hielos, permanecieron aisladas en el norte peninsular pequeñas poblaciones que evolucionaron hacia dos subespecies diferentes: la Aquitanicus, presente en Pirineos, y la Cantabricus, más pequeña, de tonos más claros y pico más corto, que habita en las comunidades del Cantábrico.A pesar de que su caza está vedada desde 1979, y que desde 1986 está catalogada como especie protegida, su número continúa disminuyendoEl urogallo es un ave de ámbito boreal, abundante en Escandinavia, los países bálticos y Rusia. En la península ibérica, su población ha disminuido considerablemente en los últimos años, hasta el punto de que actualmente es una de las especies más amenazadas. A pesar de que su caza está vedada desde 1979, y que desde 1986 está catalogada como especie protegida, su número continúa disminuyendo. A finales de los 80, se estimaba que había 942 machos adultos contabilizados, mientras que en 2001 se censaron 689.En total, se calcula que hay unas mil ochocientas parejas en España. El urogallo pirenaico habita principalmente en la comunidad catalana, donde se encuentra el 85% de los ejemplares de la península, según la Estrategia para la Conservación del Urogallo Pirenaico del Ministerio de Medio Ambiente, que apunta también que en Navarra y el sector occidental de Aragón su población se encuentra fragmentada y con escasas posibilidades de supervivencia.

CC: Capercaillie_Lomvi
Por su parte, el urogallo cantábrico apunto de extinguirse.
En Cantabria sólo queda un ejemplar macho, por lo que se encuentra abocado a su extinción, según la asociación ecologista ARCA.
En Galicia se da prácticamente por extinguido, puesto que la especie está por debajo de su umbral mínimo de renovación poblacional, mientras que en el País Vasco desapareció a principios del siglo XX.
Entre las principales causas de su regresión se encuentran las siguientes:* Fragmentación y destrucción de su hábitat.
El urogallo vuela mal, por lo que suele chocar contra cercados, vallas o árboles de bosques cerrados. Por su parte, la acción de otras especies, como el venado, también influye negativamente en su hábitat* Actividades humanas, como el senderismo, los deportes de nieve, cacerías de jabalíes o ganado en el monte* Depredadores naturales de los huevos y las crías, como jabalíes, zorros o comadrejas. La mortandad de los polluelos es muy alta en las primeras semanas de vida* Furtivismo, incentivado por los elevados precios que se alcanzan en el mercado ilegal* Cambio climático: la subida de las temperaturas estaría afectando a esta especie de ámbito boreal, que podría estar trasladándose más al norteLos expertos recomiendan la puesta en marcha de un programa de cría en cautividad, para conseguir una reserva genética que permita perpetuar la especie. Por su parte, las actividades humanas se deberían adecuar a las exigencias ambientales de la especie, tratando de no interferir en su hábitat. Otras medidas propuestas pasan por la consideración del urogallo como una "especie de interés general", lo que llevaría al incremento de los presupuestos de las administraciones.Principales características del urogalloCC: Auerhahn
El urogallo precisa de un entorno muy peculiar: bosques de conífera tranquilos, claros, con abundante vegetación y árboles con ramas fuertes y horizontales para dormir, así como agua potable y hormigueros. Se trata de un ave de gran tamaño y notables diferencias entre el macho y la hembra (dimorfismo sexual). El macho puede llegar al metro de longitud y los cuatro kilos de peso, mientras que la hembra no suele superar los setenta centímetros de longitud y los dos kilos de peso. El color del plumaje de los machos es una mezcla abigarrada entre verde metálico, gris y blanco, mientras que el de las hembras es de color rojizo con manchas pardas y lechosas. El pico también les diferencia: prominente, de forma curva y de color marfil en los machos y breve y de color negro en las hembras.Su dieta depende de las estaciones. En verano se alimenta de hierbas, crisálidas de hormiga, bellotas, bayas, lagartijas e incluso serpientes, mientras que en invierno se mantiene con agujas de los pinos y brotes. De forma regular traga piedras, que le facilitan la digestión en la molleja. La época de celo dura desde marzo hasta mayo. El macho profiere gritos de reclamo al amanecer y al atardecer para atraer a las hembras, hasta que consigue copular con varias en un mismo día. Las gallinas ponen entre cinco y doce huevos en un hoyo del suelo, donde son objetivos fáciles para sus predadores.
ARTICULO REALIZADO POR: Alex Fernández Muerza
BIERZO NATURA:
Pide que se proteja de verdad esta especie pero lo cierto es que los intereses economicos no entienden de sentimientos si no de ganancias, los empresarios son capaces de poner en contra de los grupos ecologistas, a sus trabajadores a los que explotan cada vez mas y ahora con la crisis recortando derechos sociales que costaron sangre sudor y lagrimas conseguirlos.

lunes, 8 de febrero de 2010

ÁRBOLES MONUMENTALES DE PONFERRADA (I)

Ponferrada se caracteriza por ser un municipio bastante extenso e incluir en su territorio al menos una docena de especies botánicas, que se pueden calificar como singulares o monumentales, por sus cualidades específicas o especiales.
Entre los ejemplares a destacar, los tenemos de diversas especies:


EL TEJO DE SAN CRISTÓBAL DE VALDUEZA:
La Junta de Castilla y León decidió crear en el año 1991, mediante la publicación de la L. 8/1991 de 10 de mayo, el denominado “Catálogo de Especímenes Vegetales de Singular Relevancia de la Comunidad”, regulando y estableciendo así una figura de protección para determinados exponentes resaltables de distintas especies arbóreas. Y, entre ellos y por sus cualidades notorias, el listado contenía al Tejo de San Cristóbal, incorporándose de esta manera a un Catálogo formado en virtud del desarrollo normativo y contenido en el Decreto subsiguiente.
Este milenario tejo está ubicado en la capital de la región de El Bierzo, zona que presenta una gran riqueza medioambiental y en diversidad, existiendo numerosos árboles relevantes, no simplemente por su valor monumental o paisajístico sino por ser fiel reflejo de la pluralidad y amplio valor cultural en el ámbito patrimonial berciano.
El Tejo, como ser vivo simbólico, ha sido admirado y reconocido como un árbol sagrado en El Bierzo y en otros lugares, asociándolo o vinculándolo a sitios destinados al culto religioso ancestral, como es también en este caso. Por ello, se encuentra en un enclave panorámico privilegiado: en el camposanto de la localidad o pueblo de San Cristóbal, unido en conjunto a la antigua ermita en estado semirruinoso y como vigía sempiterno de la “hoya berciana”. Desde su posición, ha tenido que ser testigo silente del paso de muchas gentes, culturas y costumbres variadas. Es considerado como un vestigio-reliquia, como auténtico monumento vivo e imprescindible, constituyendo un identificador de toda la Pedanía de San Cristóbal.
Sobre la longevidad que puede alcanzar este emblemático árbol se ha de afirmar que, con toda la probabilidad, superaría los 2000 años. En relación a referencias recientes, se ha de remarcar que ya era mencionado en el “Diccionario Geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de ultramar” (1846-1850), obra de P. Madoz y de L. Sagasti.

FICHA TÉCNICA:
Su nombre científico es el de “Taxus baccata”. Sus dimensiones son, más bien, de considerable medida: con una altura de 14,5 m., un perímetro en la cota de tronco a los 1,30 m. sobre el suelo de 4,80 m. y, a nivel de pie de base, de 7,50m. Asimismo, el diámetro máximo de su copa es de unos 17,87m. Está en la lista de “Especímenes Vegetales de Singular Relevancia”, conforme al Catálogo elaborado e inserto en el Anexo al D. 63/2003, de 22 de mayo, regulador de estas declaraciones por parte de la Junta de Castilla y León.
El Tejo, conocido de otro modo en otras áreas de El Bierzo como “teixo”, se ha conservado en diferentes puntos y casi siempre en las inmediaciones de recintos sagrados, como las iglesias y cementerios. Los más famosos y reconocidos son los de Compludo, Teixeira, Pradela, Villafeile (o Vilafeile), Salientes, Matalavilla y Noceda de Cabrera. Como curiosidad anecdotaria se ha de aludir a la recuperación y proliferación de tejos en la vecina Asturias, al lado de las ermitas como intento tardío de mantener y conservar esta costumbre tan tradicional.
El Tejo de San Cristóbal se halla a la misma entrada del pueblo, yendo desde la ciudad de Ponferrada, en la Finca llamada “El Palomar”. Su estado de conservación y vitalidad ha sido calificado de aceptable. Y en cuanto a semejanzas cabe concluir en que, tanto el ciprés como el tejo, comparten varias señas de identidad en común: ser totémicas representaciones de la inmortalidad, y ello en todo el Occidente europeo y más allá, siendo los más “a propósito” en cualquier inhumación de los difuntos.
Su transcendencia aún se puede patentizar en nuestros días. Así, una nota demostrativa de ello es que su influencia inconsciente sobre las gentes de San Cristóbal es visible en la actualidad: la cantidad de establecimientos turísticos de la localidad que aprovechan o se nombran con la palabra tejo son, más que numerosos significativos, como por ejemplo la Casa de Turismo Rural “El Tejo Milenario” y el “Mesón El Tejo”.

CREENCIA POPULAR:
Este árbol, cuyo crecimiento es lento y pausado compensándose con una vasta longevidad y durabilidad, se compone de una madera y tronco duros y elásticos a la vez, utilizándose en la antigüedad como un buen material para fabricar y componer arcos.
Se avisa y previene respecto a su toxicidad, hasta incluso sus semillas, con la salvedad de una especie de arilo rojizo que las rodea. Este fruto encarnado es de sabor bastante dulce y de viscosidad notable, sirviendo como aperitivo en la dieta de aves rapaces de algunos pueblos del sur de Ponferrada.
Las aves separan con un cuidado exquisito la dura e impenetrable semilla que contenía. De ahí que muestre la tradición la convicción de que, si se desea que la semilla germine, anteriormente tiene que fermentar y ablandarse o “cocer” en el “botillo” o vientre de un malvís, un mirlo o una cotorra.


EL EVÓNIMO DE RIMOR:
En Rimor, algunos dicen que a falta de un ciprés, sus habitantes colocaron en el interior de su cementerio un evónimo, más específicamente en el careo sur de la iglesia de San Jorge. Nadie es capaz de suponer, a ciencia cierta, cuándo pudo ser plantado. Lo realmente importante es que todos le prodigan cariño: en sus primeros inicios, por el fruto colorado-encarnado con que teñía el suelo del espacio sagrado y, ahora, por su aspecto llamativo de encorvamiento.
CUIDADOS Y TRATAMIENTOS:
Este evónimo exótico japonés es un interesante y atractivo ejemplar. A partir de los años sesenta, fue ladeándose para, seguidamente, comenzar a arquearse en un proceso casi irreversible.
En enero del año 2004, “A Morteira”, Asociación conservacionista, se implicó en las labores de limpieza, desbroce y eliminación de la vegetación que había invadido y tapado el entorno del evónimo, siendo varios los vecinos que ofrecieron su trabajo y colaboración, cuando los frutos enrojecidos y ostensibles ocupaban, como cada invierno, parte del cementerio.
En mayo del 2005, “A Morteira”, con el auxilio de técnicos del Departamento de Árboles de la Diputación de Valencia, con la inestimable ayuda de vecinos de Rimor, procedieron a efectuar tareas de poda y consolidación del evónimo.
La urgencia de la actuación vino derivada por la rotura que sufrió el excepcional ejemplar a causa del peso acumulado por la nieve caída en Navidad.
A juicio del reputado botánico Bernabé Moya, el evónimo estaba en una fase de peligro inminente de pérdida total, como consecuencia de los graves daños estructurales que se observaban.
Finalmente, en el año 2007, la por entonces Edil de Medio Ambiente del Consistorio ponferradino, Teresa Gª Magaz, prometió que de parte del Ayuntamiento se realizaría el acotado del evónimo de Rimor.
Fue, en esta ocasión, cuando el Colectivo “A Morteira” reclamó por enésima vez a la Concejalía de Medio Ambiente el inicio del proceso para la aprobación de la Ordenanza Municipal de Protección del Arbolado de Interés Local.

DATOS TÉCNICOS:
La especie es nombrada habitualmente como “Bonetero del Japón” (Euonymus japonicus). El perímetro troncal es de 0,98 m., la altura del tronco desde superficie es de 1,90 m., la dimensión longitudinal del tronco de unos 4,80 m. y la altura global o total del árbol, de unos 4,50 m.


EL CEDRO DEL INCIENSO DE CAMPO (FINCA VALDÉS)
GENERALIDADES:
Este árbol puede lograr crecer hasta los 40 m. de altura, con la copa redondeada de alguna forma, bastante cerrada. Su corteza es delgada, suave y lisa y de color gris-verde.
Se da un aspecto diferencial según la edad: en los ejemplares jóvenes, la corteza va desde la tonalidad canela a rojiza y, superficialmente, es escamosa o rugosa. En los árboles viejos, sin embargo, la corteza es de un grueso de entre 3 y 8 pulgadas y su color es variable, yendo desde el pardo-amarillento hasta el rojo-canela. Su textura, en esta edad avanzada, es fibrosa en toda su profundidad, hallándose irregularmente surcada con un tipo de hendiduras longitudinales, en el contorno, o bien en disposición de placas aplanadas. Es una especie botánica de gran interés ornamental. Debido a esta cualidad, se ha extendido por EE. UU. y en Europa, fundamentalmente la variedad “compacta Beiss”.
La Finca Valdés está “situada en las inmediaciones de la localidad ponferradina de Campo” y se considera, en muchos aspectos, el símbolo o manifestación de la gran herencia que, hace más de treinta años, legó el hombre especial que fue Miguel Fustegueras, “Valdés” popularmente.
En sus disposiciones testamentarias, ordenaba la enajenación de todas sus fincas y bienes inmuebles, a fin y objeto de que fuera construida una Residencia para los ancianos.
Pues bien, en el simulacro de jardín botánico y arboreto en que se transformó la “Finca Valdés”, se reúnen un buen abanico de especies arbóreas: pinos piñoneros, olivos, encinas, arces, madroños, palmeras, magnolios, laureles,… Y, entre todas ellas, se alza majestuoso el Cedro de California o del Incienso.

DATOS TÉCNICOS:
La especie concreta es de Cedro blanco de California (“Celocedrus decurrens”). Su altura total es de unos 31,20 m. Sus dimensiones perimetrales son de 3 m. en la parte basal y de unos 2,55 m. a la distancia de 1,30 m. sobre tierra.

MARCELINO B. TABOADA

viernes, 5 de febrero de 2010

BIERZO NATURA SE UNE A LA PLATAFORMA EN CONTRA DE LA LÍNEA DE ALTA TENSIÓN SAMA-VELILLA







El eslogan de “Asturias: paraíso natural” va a sufrir un duro golpe de desprestigio con todo lo que conlleva la construcción por R.E.E. de una nueva línea de evacuación de energía eléctrica desde Asturias y su interconexión con el resto de España y Europa, que pueden prescindir sin problemas de esta infraestructura. Y es que los gobernantes asturianos socialistas sólo piensan en fomentar un desarrollismo que no conduce a ninguna parte: creación de más centrales de ciclo combinado, una regasificadora y una consiguiente ampliación del Puerto de El Musel, en Gijón.
Por si ello no fuera suficiente, el Presidente asturiano se caracteriza por el frentismo en oposición a la provincia leonesa, que ha mostrado hasta la saciedad su disgusto con esta instalación que transcurriría, en caso de realizarse, por un trayecto de unos 80 kms. de las montañas central y oriental leonesas, afectando a lugares naturales singulares de gran valor.
En este aspecto, hay que recordar al insolidario, oportunista e insensato Sr. Areces que la línea proyectada sí incide indirectamente en la Reserva de la Biosfera de la Montaña Cantábrica centro-oriental leonesa, cuyo título le otorgó la UNESCO.
Esta imposición no va a amedrentar al movimiento ecologista en nuestra provincia, leonés y berciano, de tal manera que rechazamos hipotéticas compensaciones económicas para paliar un daño injusto e irreversible.
Bierzo Natura exige al leonés Zapatero que se ponga al frente de las reivindicaciones de su tierra y que deseche totalmente la línea de alta tensión diseñada y que algunos nos tratan de vender.
Bierzo Natura declara, asimismo, que el Presidente de Red Eléctrica nos pretende embaucar con falacias, como su afirmación de que la Línea no repercutiría negativamente en la extensión de los bosques autóctonos o en la zona inmediata de protección del oso pardo y el urogallo.
Por otra parte, Bierzo Natura propone al nefasto e irracional Presidente asturiano que, si tanto desprecia el medio natural, permita que la Autovía Ponferrada-La Espina recorra espacios protegidos y no sea transformada en vía verde a través del Túnel del Rañadoiro.
Finalmente, reprochamos a los Ministros y Presidente leonés su insensibilidad ante las 30.000 alegaciones presentadas y no tenidas en cuenta respecto al trazado tan insatisfactorio de las propuestas dadas a conocer.
Y decimos alto y claro desde Bierzo Natura que emplearemos todas nuestras armas en respuesta a la demanda de ayuda y solidaridad de la Plataforma Sama-Velilla y, con ellos, nos conjuramos con un mismo objetivo: “Que nunca más los intereses económicos primen sobre los humanos, sociales y turísticos de la Montaña leonesa”. Y, con esta determinación y todos unidos, mantendremos la integridad de nuestro medio ambiente, aunque para ello tengamos que librarnos de la avaricia de los unos y las ansias de poder de los otros.

miércoles, 3 de febrero de 2010

DE PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD A ESTERCOLERO

DE PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD
A ESTERCOLERO
BASURA DE TODO TIPO SE AMONTONA EN EL ACCESO AL CASTRELÍN DE SAN JUAN DE PALUEZAS, CERCA DE LAS MÉDULAS, MIENTRAS EL CASTRO PRE-ROMANO SUCUMBE A NUEVOS DESTROZOS
El Foro Cultural de la Provincia del Bierzo denuncia que “dentro de los límites del parque arqueológico Patrimonio de la Humanidad de Las Médulas, en el los accesos al Castrelín de San Juan de Paluezas, nos encontramos que ha surgido un nuevo vertedero en el que basura de todo tipo campa a sus anchas: sofás, electrodomésticos, restos de construcción,... se extiende en un gran espacio a un lado del camino de acceso al Castrelín”. Por si fuera poco, y acumulándose a los destrozos causados recientemente en el Castrelín de San Juan de Paluezas, otros nuevos atacan la integridad de los muros de este castro, según el Foro.“No sabemos si estos nuevos destrozos han sido causados por la mano humana o por la naturaleza, pero la reiteración de estos sucesos hace necesario que desde las autoridades responsables se tomen medidas”,
Nuevamente tenemos que dar a conocer una noticia protagonizada por el abandono de nuestro patrimonio. Dentro de los limites de el parque arqueológico patrimonio de la Humanidad de las Médulas, en el los accesos al Castrelín de San Juan de Paluezas nos encontramos que ha surgido un nuevo vertedero en el que basura de todo tipo “campa a sus anchas”: sofas, electrodomésticos, restos de construcción,... se extiende en un espacio no pequeño a un lado del camino de acceso al Castrelín. El tamaño de mucha de la basura depositada hace suponer que no fue transportada por vehículos pequeños y que fueron varios los días (sino semanas) en que se depositó, aunque por las recientes rodadas que hemos observado en el suelo suponemos que no hace mucho que realizaron la última descarga.
El Castrelín de San Juan de Paluezas Estaba amurallado. La estructura de la vivienda tipo era compartimentada en zonas: una de vivienda es si, un patio de vestibulo, una zona de almacén y otra para el trabajo. Su construcción era de piedra con una cubierta de madera y paja entralazada impermeable.
Los Castros son poblados fortificados protegidos normalmente por fosos o murallas. Están ubicados en zonas con agua y terrenos fértiles. Sus calles no forman ángulos rectos y sus construcciones suelen ser de planta circular.
La excavaciones arqueológicas realizadas en las Médulas han permitido descubrir este castro y conocer como vivían las comunidades prerromanas astures que habitaron esta zona desde el siglo III a.C. hasta el cambio de era.

Por si fuera poco, y acumulándose a los destrozos causados recientemente en el Castrelín de San Juan de Paluezas, otros nuevos atacan la integridad de los muros de este castro. Las fotos, tomadas también ayer, sirvan de testimonio de lo que ya parece la crónica de un abandono. No sabemos si estos nuevos destrozos han sido causados por la mano humana o por la naturaleza, pero la reiteración de estos sucesos hace necesario que desde las autoridades responsables se tomen medidas

Articulo de nuestro Blog amigo:

http://foroculturalprovinciaelbierzo.blogspot.com/

martes, 2 de febrero de 2010

ÁRBOLES MONUMENTALES DE VILLAFRANCA DEL BIERZO

EL CIPRÉS DE LA ANUNCIADA:
Ha sido mudo testigo, durante más de 400 años, de la historia y evolución histórica y social villafranquina. Actualmente está inmerso totalmente en un proyecto de conservación, tratamiento y recuperación, para estabilizar (que no curar) las enfermedades que lo debilitan y amenazan de forma integral. Se trata de divulgar y salvar un legado auténtico en el aspecto botánico, histórico-religioso y tradicional de Villafranca.
Los cuidados se le vienen prodigando y prestando desde el año 2005. El eminente botánico especialista Bernabé Moya lo viene mostrando desde un principio, momento en el que se comenzó a aplicar un nuevo plan de tratamiento, antes de que el ejemplar fuera a cumplir su IV Centenario, en el 2.006.




Añade Bernabé que es preciso ser cautos y prudentes, puesto que lo único que se puede lograr es ralentizar y detener el avance de un mal complejo, que es la suma de una “tríada de agentes patógenos o perjudiciales que aquejan al árbol y que seguirán presentes, aunque controlados”.
A pesar de su optimismo, Bernabé manifiesta que “las patologías que afectan al árbol no tienen una solución definitiva o de raíz”, pues se intenta frenar la secuencia mortal de tres elementos coadyuvantes o coincidentes que han creado un cuadro grave: la armilaria mélea, un hongo que fue el origen o causa de la muerte del árbol de Guernica; el chancro colorado, que ha acabado como plaga con la vida de millones de cipreses en Europa y los escolíticos, casi microscópicos escarabajos que en grupos taladran y perforan las ramas del ciprés, con un resultado letal.
Antonio Nespral, representante autorizado de la Asociación “A Morteira”, reclamó una vez más la implicación y actuación de todas las Instituciones competentes “ya que los tratamientos que le hacen falta al ciprés requieren un amplio plazo y es necesario, por tanto, una vigilancia y trabajo continuado y permanente”.
Finalmente, Nespral sostiene que el Consejo de El Bierzo se debe dar por aludido, al haberse comprometido a elaborar un Catálogo de árboles monumentales y bosques y ecosistemas singulares de la Región. “A Morteira” deposita toda la confianza en el Ente berciano con la esperanza de que “siga manteniendo su promesa”.
En marzo de 2.006, el Colectivo ecologista señala su estupefacción al comprobar cómo un árbol que se ha distinguido a nivel nacional con la emisión de un sello por el Ente autónomo Correos no está en la lista del Recopilatorio efectuado por la Junta, en cuanto que se descuida así su tratamiento y restauración especiales.
“A Morteira” recuerda que el árbol se halla en la actualidad en un “serio y real peligro”, considerando el importante problema de la salud que sufre, incrementado con la caída que se produjo en el 2.006 del muro que lo protege y ampara.
Es de alabar el papel que ha jugado la Diputación de Valencia, encargándose de restaurar el ciprés más longevo de España. Su edad está establecida en más de 400 años, algo inusual. La investigación de la Universidad valenciana se ha aprovechado, además, para un mejor conocimiento de los tres males que padece el ciprés y para realizar una especie de “protocolo común” a emplear en el conjunto de cipreses históricos y monumentales de la zona mediterránea.





panoramio by Horta EL MIRANDELO

LA GLICINIA DE VILLA FEMITA:
Simplemente, cabe destacar que perteneció a la antigua fábrica o destilería de alcohol. Y sus cualidades están a la vista de todos: es un espectáculo maravilloso contemplar su exuberante y vigorosa floración cada primavera. Es uno de los atractivos esenciales y monumentales del Restaurante “Villa Femita”.


CRÍTICA AL ESTADO DEL JARDÍN ROMÁNTICO DE LA ALAMEDA:
Los mayores, y los no tanto, no se han olvidado de que el Jardín de la Alameda estu vo poblado de olmos centenarios y de abetos de porte monumental. De esta guisa, el Jardín mostraba un aspecto y talante señorial y salvaje, constituyendo bajo su protección un microclima caracterizado por la frescura que se conservaba continuamente. Por otra parte, los otoños invitaban a la melancolía al pisar un impresionante manto de hojas caducas que se elevaban hasta casi la rodilla.
Hoy en día casi “consiguen” los adláteres políticos que el Jardín sea anodino, con unas interminables hileras de plátanos dispuestos “en formación”.
En el espacio verde ciudadano existía, asimismo, un buen ejemplar de magnolio y diversos árboles propios de jardín. Para mayor regocijo había un cuadrado dedicado a los pensamientos, otro a las flores de temporada y corta duración, el paseo romántico donde afloraban las lilas,… En definitiva, entonces sí que era en propiedad el romántico jardín de la Alameda.


EL MAGNOLIO DE LA HACIENDA LUNA-BEBERIDE:
En el Castillo de Peñarramiro o de Vilafranca, residencia habitual del extraordinario compositor y músico Cristóbal Halffter, el atardecer en una de las terrazas que dan al parque es esplendorosa: una panorámica de pinsapos, cedros y, por encima de todos, se observa un magnífico magnolio, para envidia de todos, floreado intensamente y, no en vano, es la pasión vegetal del dueño del monumento o fortaleza. No obstante, los magnolios que causan más impresión y admiración están en el jardín de la casa de los Luna-Beberide.





LOS MADROÑOS:
El medio natural y ambiental del entorno de Villafranca atesora en su seno una grandiosa riqueza y biodiversidad ideal y valorada para el disfrute de vacaciones de turismo rural, y ello producto de que aquí se juntan y confluyen dos tipos de bioclimas típicos de dos regiones biogeográficas distintas: el clima continental húmedo, con unas apreciables cantidades de lluvia del atlántico, con su complemento de brumas, orballos y “marmañas” que, a veces, esconden los bosques de robles, abedules, acebos,… y el de influencia mediterránea, más calido, suave y seco, en el que reinan por su capacidad adaptativa las encinas, los alcornoques y los madroños. Los madroños tienen una denominación genuina de Villafranca (“merodos”) y su designación científica es “Arbutus unedo”.
El mayor madroño del que se tiene noticia en esta área alcanza los 8 metros de altura y unos 3,50 m. de circunvalación o perímetro de tronco. Su edad se calcula que esté entre los 300 y 350 años. Una nota anecdótica es que sus frutos son bastante indigestos y no recomendables.

MARCELINO B. TABOADA

viernes, 29 de enero de 2010

ÁRBOLES MONUMENTALES DE LA SOMOZA BERCIANA






Esta antigua Comarca (que lo fue hasta la absorción del municipio de Paradaseca por Villafranca del Bierzo) ha cedido protagonismo socio-económico para ser integrada en la Comarca Bierzo Oeste de nuestra Región.
Pero hay maravillas de las que puede presumir sin ningún recato y una de ellas es la de tener dentro de su área nada menos que cinco árboles monumentales o ecosistemas singulares, dignos de elogio y admiración.


EL “CAMPANO” DE VILLAR DE ACERO:
Aproximadamente a unos 20 kms. de Villafranca y, justo entre La Leitosa y Tejeira y flanqueándola un castañar a la izquierda en su acceso de entrada (de nombre “Daquelado”), se sitúa la localidad de Villar de Acero (Vilar de Aceiro).
Aquí los prados amplios, casi siempre verdes, de ribera, sus lameiros de aguas puras y cristalinas y sus robledales de antaño nobles que crecen y se desarrollan en el en todo tiempo húmedo acordeón desplegado de sus montes son la tónica habitual.
En el monte comunal de Villar se cobija toda una joya natural: el castaño “O Campano”, el ejemplar de todas las especies más ancho y grueso de toda la Península Ibérica. Se le puede reconocer como “el árbol totémico y simbólico de toda la zona”.
El gigantesco castaño, que ya ha cumplido centenares de años apegado a esta tierra, es un orgullo para los vecinos de Villar de Acero, Pedanía típica de la Somoza berciana y que pertenece al municipio de Villafranca del Bierzo, habiéndose incluido en el ámbito de protección de la Reserva de Ancares.
CURIOSIDADES:
Es, con total certeza, uno de los más emblemáticos, célebres, grandes, añosos y extraordinarios no sólo de todo el espacio circundante, sino también de Europa. Los entendidos y peritos estiman que su edad podría rondar los 800 años de existencia.
Este ejemplar mastodóntico está dimensionado con unas cifras de impresión: 34 metros de altura, su copa tiene de diámetro unos 16 m. y la longitud perimetral de su tronco alcanza los 15 m. y medio. Es decir, que sería preciso unir “en corro” a entre 9 y 10 personas-tipo con los brazos desplegados para abarcarlo en todo su contorno.
El enorme y viejo castaño está quemado y herido por las huellas incendiarias. Ahora, en consecuencia, apenas da cosecha de castañas, mientras que por los años 40 proporcionaba, para hacerse una idea, dos carros repletos tirados por vacas simplemente de oriceras, después de la recolección del fruto.
Su estado actual es debido a la grave repercusión que sobre él ha ejercido un fatídico y espectacular incendio en los años 80 y al abandono de la siembra de centeno (pan) en las fincas adyacentes.

ARCES O PRADAIROS DE PARADASECA:
Desde el mismo pueblo es de rigor girar una visita a una elevada y apartada ermita, protegida y custodiada por unos grandiosos arces (pradairos), con la intención de descender luego hasta la Campa del Pradairo (hoy, paradójicamente, sin arce) ya en las cercanías de los lindes del monte paradariego con el de Villar de Acero. Se trata de los tres renombrados esplendorosos pradairos de la ermita de Fombasallá.
Enfrente de la ermita de Sta. María Magdalena, en el lado opuesto del río Burbia, se pueden contemplar los restos de la antigua Herrería con un curioso mecanismo hidráulico, que tendría que haber abastecido durante todo el S. XIX a la fábrica de armas de Oviedo y que tuvo que ser clausurada al finalizar la Guerra de la Independencia.
La madera de los arces servía con frecuencia y buen aprovechamiento para hacer galochas, cucharas y cuencos, fundamentalmente.
En definitiva, estos tres arces o “pradairos” centenarios se revelan, cobijando a su amparo una vieja ermita, como la estampa típica y más divulgada entre los habitantes que todavía moran en las aldeas del ya extinguido antiguo Ayuntamiento de Paradaseca.


“EL MIRANDELO” DE POBLADURA DE SOMOZA:
Entre los soutos de nuestros pueblos y aldeas aún resisten sorprendentemente varios castaños monumentales, de los que durante siglos proporcionaron sustento a personas y bestias domésticas y silvestres. Como exponente definitivo de ello cabe aludir al Mirandelo de Pobladura de Somoza, desde el cual se disiva y abarca visualmente gran parte de la hoya berciana.
En Pobladura, las masas forestales características de ribera se entremezclan en una armonía insuperable con los aprovechamientos humanos tradicionales. Encinares y alcornocales de los que todavía se extrae y comercializa el corcho, viejos y originarios bosques nada adulterados (“morteiras”) en las cabeceras de los valles donde nacen fuentes y manantiales, escondiendo en su lejanía un impresionante tesoro biológico son alicientes más que suficientes. Lleras y penedos representan un paisaje mágico y hermético.
Como atractivos, hace falta aconsejar la contemplación de la pila bautismal y los vestigios de las minas romanas en el arroyo de Rubicales, en Pobladura de Somoza.


LOS CASTAÑOS Y LOS ROBLES DE PORCARIZAS:
La denominación o topónimo sugiere una piara o varias de cerdos, aunque se ha de desechar esta vía en un lugar tan apartado, montaraz y escarpado. Antes bien, la teoría más admitida se basa en elementos contundentes (gran biodiversidad y riqueza alimentaria de los bosques, abundancia de agua) señalando con toda probabilidad a la proliferación de suidos salvajes (dicho de otro modo, jabalíes o puercos monteses) que sí son capaces de soportar la duraza y las malas condiciones climáticas y del quebrado terreno que los “cochos” domésticos de ceba no aguantarían.
Una circunstancia por analizar y estudiar es el conjunto de Valles glaciares muy antiguos en Porcarizas, Campolagua, las Algeiras,… hasta el camino de confluencia o unión de Airadapedra con Burbia. Esta ruta o itinerario está plagado de fuentes y arroyos y de una vegetación arbórea profusa, frondosa y acaparadora, entre la que se muestran con brillantez los robledales a media ladera de las montañas, los arces o pradairos, los fresnos, los abedules, los serbales o “capudrios” humeiros, los tupidos acebales, hermosos e inesperados en altas latitudes.


EL VERRUGOSO DE PORCARIZAS:
El colectivo ecologista-conservacionista berciano “Tyto Alba” ha logrado impedir y rescatar de la tala un castaño centenario en la aldea somocense de Porcarizas, en el Valle del Burbia. El destino final de este singular árbol estaba orientado para embellecer algunos salpicaderos de “berlinas de lujo”. La Asociación, tras varias gestiones, consiguió igualar la oferta monetaria de 1.200 € que una Compañía maderera había lanzado y estaba a punto de ser aceptada por el dueño del valioso ejemplar.
Tyto Alba, a principios del 2.003, pretendía con su actuación que las Administraciones se implicaran directamente en la protección de estos árboles que se pueden catalogar como “auténticos y relevantes monumentos naturales”.
Tanto en Porcarizas, como en Villar de Acero y Teixeira se pueden observar con encantamiento diversos tejos de un porte excelente agregados con el caserío, como símbolos ancestrales que personificaban la eternidad, la protección y buena fortuna y la sabiduría e inteligencia.

MARCELINO B. TABOADA

domingo, 24 de enero de 2010

EL MUSEO “NATURA IBÉRICA” DE CARRACEDELO

EL MUSEO “NATURA IBÉRICA” DE CARRACEDELO

En los primeros meses del año recién terminado el Regidor de Carracedelo, Raúl Valcarce, manifestaba su propósito de habilitar un espacio a fin de que una parte de la Colección del conjunto de piezas del taxidermista berciano Solís Fernández fuera puesta en valor y a exposición pública. Estas declaraciones, ante la presencia del Presidente del Consejo Comarcal, aludían también a su apertura en junio, con motivo de la anual Feria Multisectorial y de Agroturismo. Sin embargo, debido a la premura de tiempo, se tuvo que aplazar unas cuantas fechas.




Se trataba de un millar de piezas procedentes de la gran colección que el taxidermista berciano tenía en su poder, albergadas en un inmueble de350 metros cuadrados en Matarrosa del Sil. Serían trasladadas al recinto denominado “Natura Ibérica”, aledaño al Complejo “El Oro de Roma”.

Este exponente museístico aspira a convertirse con el tiempo en una magna representación de la fauna de la Comarca berciana, después de que se consolide con una nueva ampliación, concebida como segunda fase para completar la instalación de toda la colección de Solís y permitir, además, el avance en investigación y descubrimientos.

Para llegar hasta la inauguración, a mediados del mes pasado, la Fundación “Plinio Naturalis Historia” ha efectuado un proceso de selección de piezas de las que Solís Fernández guardaba en su vivienda particular, quedando en depósito y a la espera un fondo todavía de mayor volumen del que se exhibe, conforme a las explicaciones de la Teniente de Alcalde carracetelense Amparo Vidal.

La Institución fundacional mantendrá a la visita del público en general más de mil ejemplares del insigne autodidacta toreniense, que ha logrado desde la nada transformarse en una referencia necesaria para cualquier estudioso de la naturaleza en nuestra provincia, y más allá.

Las instalaciones y su adecuación para cobijar la amplia colección de animales disecados por el taxidermista de Matarrosa, Solís Fernández, ha supuesto una inversión total de 1,7 millones de euros y su situación es estratégica para el turista, a la altura del km. 399 de la Autovía A-6. El Presupuesto fue cubierto por la Junta y el Grupo de Acción Local, con la colaboración de la Diputación.

El Director de este novedoso museo es Manuel Reguera y al acto de inauguración concurrieron, arropando a Solís, la Presidenta de Diputación, el Delegado provincial de la Junta y el propio Alcalde del municipio.

En concreto, el primer Edil de Carracedelo dio a saber sus pretensiones: solicitó más esfuerzo y ayuda a Diputación para proseguir con la segunda fase, desvelando de pasada la actuación para crear un nuevo Albergue de Peregrinos, con el objeto de que este municipio del Bierzo central fuera abriendo posibilidades con una modificación de la estructura económica, desde el sector agrario hacia los ámbitos industrial y turístico.

BREVE RECORRIDO:

La biodiversidad con que cuenta El Bierzo, específicamente, y la PenínsulaIbérica se encuentra recogida en las diferentes salas. La finalidad de este Espacio cultural es ofertar a los que acudan una visión global del Bierzo, en materia faunística.

Para comprender todo el sentido, se ha de glosar mínimamente la figura de Solís. Sus principios fueron en 1.954, sin duda duros. Entre sus muchas circunstancias de interés, cabe referir que ha colaborado en diversos momentos con los responsables del Centro Superior de Investigaciones Científicas (C.S.I.C.), tanto en el Parque Natural de Doñana como en el Museo de Ciencias Naturales. Su impresionante actividad le ha llevado a recopilar unas 4.000 piezas. En este abanico extenso se ejemplarizan tanto los sistemas atlánticos, como los mediterráneos. A ello se dedica la planta baja. En la primera se recopilan distintas especies de reptiles, anfibios e insectos (ciervos volantes, abejas, cucarachas,…).

En definitiva, “Natura Ibérica” muestra la enorme diversidad que hallamos en El Bierzo a través de los diferentes ecosistemas que lo componen: a partir de la Alta Montaña, se contemplan posteriormente el monte mediterráneo, el robledal, el alcornocal, las Médulas, la zona esteparia,… En conclusión, un millar de elementos valiosos del taxidermista Solís.

Englobaría, en sentido omnicomprensivo, una representación de la fauna propia de la Península Ibérica, desde los pequeños insectos hasta, en el otro extremo, mamíferos de cierto porte como el lobo, el jabalí, la cabra montés, el corzo, el rebeco,… e, incluso, con una atractiva aportación en cuanto a especies hoy amenazadas (el urogallo, la nutria, el águila real,…). Un efecto de especial intensidad se produce al observar cómo un azor está a punto de capturar una liebre, totalmente aterrorizada y, del mismo modo, en otras estampas.

Por último, es preciso informar que el horario habilitado al efecto de visita es de 11 a 14 h. y de 16 a 19 h. (que cambia de 17 a 20.30 h., entre mayo y septiembre), en días laborables con una salvedad (los lunes está cerrado). Los domingos y festivos abre de 11 a 14 h.




SOLÍS FERNÁNDEZ:
Su nacimiento se produjo en la localidad berciana de Matarrosa del Sil, en octubre de 1932. Como tantos, su infancia se caracterizó por las secuelas de la Guerra Civil, no llegando a conocer a su padre hasta los 17 años.
Su niñez y juventud, en buena medida, las empleó pastoreando los rebaños de ganado; puede ser que aquí se desarrolle su amor por la naturaleza y el medio ambiente circundante, surgiendo en él insensiblemente un exacerbado interés que lo guiaría en “su vocación auténtica”: la taxidermia.
En 1952, el azar hizo que cayera en sus manos un anuncio de la prensa escrita que proponía un “Curso de taxidermista por correspondencia”, dando así sus primeros pasos en su estudio y especialización.
A riesgo de ser repetitivo, es preciso significar cómo los bercianos somos poco proclives a alabar el trabajo bien hecho de nuestros paisanos. No obstante, Solís se ha ganado el aprecio siendo un hombre sencillo y agradecido. Aún hoy se muestra abrumado al recordar cuando el Instituto de Estudios Bercianos le concedió la distinción de “Socio de Honor”.
Es un artesano o artista hábil, formado a sí mismo, genial, con cualidades reseñables y destacadas para ser reconocido y loado, alejado del bullicio y las falsas alabanzas. Y todavía con más encomio pues es un hombre de trato amable, agradable, con sentido del humor y de la benevolencia y mucho vigor y fortaleza a sus años, que disfruta con la tarea diaria y enseñando a las mentes despiertas y curiosas que quisieren escucharlo. Se le han quedado grabadas dos fechas del año 2003: el Homenaje a su persona de parte del I.E.B. (25 de junio) y la entrega de la Picota de Plata de su Ayuntamiento (29 de noviembre).
Atesora en la actualidad un museo extraordinario de bichos disecados de lo más variado y sorprendente (ginetas, gatos monteses, tejones,…) y, tal vez, el conjunto más completo y numeroso, documentado y estudiado de anfibios y reptiles de nuestro país. Mas lo que “más le tira” son los mamíferos y dice sin el menor asomo de empacho: “El Bierzo contiene la mayor variedad de mamíferos de toda Europa”. ¡Ahí queda eso, pues! Es un buen conocedor de todo lo relativo al urogallo, hasta tal punto que colaboró y llevó a cabo un trabajo de investigación sobre este hermoso, huidizo y enigmático animal. Le agrada ya recordar sus inicios y su trayectoria, comentando: “aprendí en la Universidad de las urces (del monte)”.
Ha realizado visitas a varios de los Museos de Ciencias Naturales más célebres: a los de Nuva York, Philadelfia y Washington, de EE. UU., al de Toronto, en Canadá, a los de Londres, París y Madrid, en Europa,…
En el año 2002, en un Congreso Internacional al que fue invitado en la ciudad de Toronto, expuso las conclusiones de un trabajo sobre micromamíferos, constituyendo toda una sensación agradable entre todos los asistentes.
Asimismo, ha proporcionado información de primer nivel en algunas tesis doctorales:
- “El microtus lusitanus”, para la Universidad de Barcelona.
- “El mono aullador”, dirigida por Francisco Braza Lloret, leída en 1978 en la Universidadhispalense.
- “El urogallo en España”, de Javier Castroviejo, avalada y a instancias del C.S.I.C.
Ha divulgado artículos y ensayos en diversas revistas de naturaleza. Es relevante, entre ellos, el correspondiente a junio de 1985 en la Revista “Vida agrícola” sobre el tema de “Propagación y tratamiento de las enfermedades apícolas”.
Prestó su ayuda, mediante documentación experta, en algunos programas del naturalista y conservacionista Félix Rodríguez de la Fuente. Formó parte de la expedición que un buen número de biólogos del Parque de Doñana giraron en 1975 a Venezuela. Allí, según se relata, se vieron en riesgo grave que culminó con la captura de una serpiente anaconda de 38 kg. de peso y de una longitud de 5 m. Un especimen que impone gran respeto.
Su proyecto más conocido pasa por investigar sobre “la historia de las palomas y los palomares” en El Bierzo, en cuyo afán participa conjuntamente Ramón Cela.

MARCELINO B. TABOADA