viernes, 23 de octubre de 2009

AL GORE: EL ADALID DE LA “CAUSA”



AL GORE: EL ADALID DE LA “CAUSA”


BIOGRAFÍA:

Albert Arnold Gore Jr. nació en Washington D. C. un 31 de marzo de 1948. Es un político norteamericano de profundas convicciones ecologistas. Consiguió ser el cuadragésimo quinto Vicepresidente de los Estados Unidos bajo la era de la Presidencia de Bill Clinton. También se presentó como candidato demócrata a la presidencia del país en el 2000, perdiendo “por la mínima” las elecciones presidenciales frente al otro aspirante, George Walker Bush.

En el 2007 se le concedió el Premio Nobel de la Paz, ex-aequo con otra Organización. Asimismo, en este año recibió el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional. La justificación de ambas distinciones fue el haber contribuido e impulsado una reflexión global y una acción mundial de lucha contra el cambio climático (calentamiento de la Tierra).

En 2006 fue el principal protagonista del documental “Una verdad incómoda”, que resultó ser el ganador de un Óscar. El argumento de este reportaje versa sobre todo lo relativo al cambio climático, corresponsabilizando directamente tanto a las personas, como a los gobiernos y a las industrias de semejante mal.

Insta, como moraleja, a emprender una senda de búsqueda incesante de nuevas alternativas, fundamentadas en el uso de energías limpias si no queremos vernos abocados, a medio plazo, a asistir a la destrucción de nuestro planeta.

Antes de proseguir con los presupuestos más conocidos de Al Gore, así como de otras reflexiones que ha reiterado en sus manifestaciones y rondas de conferencias, se ha de esbozar en resumen lo que representan las Fundaciones, cuya relevancia en Norteamérica y en el mundo occidental es creciente.

Las Fundaciones (en principio, para fines altruistas) se están convirtiendo a modo de “lobbies”, como manera indirecta de influir en el sentido de la política. A veces, incluso, se trata también de liberarse de los impuestos con objetivos no tan claros ni generosos.

Por otra parte, los Entes fundacionales pueden obedecer a lo que está “tan en boga” de la Responsabilidad Social Corporativa (R.S.C.) de multinacionales y grandes empresas, sobre todo. En este aspecto, es una técnica más de marketing y publicidad, atrayendo así a los consumidores o usuarios más concienzados con el medio ambiente y, por añadidura, para crearse un “halo” de mayor respetabilidad.

Cualquier magnate americano que se precie, por mentalidad, intenta que su imagen pública y privada resplandezca, empleando parte de su fortuna en acciones de generosidad hacia causas nobles. Y, más allá, existe un anhelo de perdurar después de la desaparición del personaje inmortalizándose mediante el hecho de dar nombre a una Fundación. Ello se basa, quizá, en aquello tan socorrido de:

“No preguntes lo que América va a hacer por ti. Antes, plantéate lo que tú estás dispuesto a aportar a la gran nación americana”.

Ya, entrando de lleno en la teoría de conjunto de Al Gore sobre el recalentamiento atmosférico, en principio es preciso dejar constancia que su preparación y conocimientos son los de un “entendido”. Y, además, su amplia trayectoria de gobernante le habilita para disponer de una enorme cantidad de datos y constataciones a las que bien pocos tienen posibilidad de acceder.

PUNTO DE PARTIDA DE LA ARGUMENTACIÓN:

Como presupuestos “objetivos” previos, Al Gore cree que ya se han evidenciado los siguientes elementos fácticos, que son incontestables:

- La humanidad, en su globalidad, está aquejada y afectada por una crisis con varios frentes a combatir: el climático, el económico y en el área de su seguridad.

- La relación entre el género humano y el ecosistema del que forma parte se empezó a quebrar ya desde hace 50 años, siendo en el presente muy precaria.

- Un dato a tener muy en cuenta es la explosión demográfica producida: desde los 1.600 millones de habitantes del año 1900 hasta superar, en estos momentos, la cifra de 6.800 millones.

- El calentamiento es real, ampliamente demostrado y ya nos comienza a mostrar sus devastadores efectos, si bien a pequeña escala.

- Las nuevas tecnologías tienen su lado negativo y el mejor exponente es que pueden incrementar la capacidad destructiva hasta “un millón de veces”, en el caso de la carrera tecnológica de desarrollo del armamento nuclear.





ALGUNAS IDEAS ILUSTRATIVAS:

La actividad humana ha ido incrementándose durante muchos años, transformando el medio ambiente. Por tanto, sólo las personas son culpables y les será achacable la destrucción que, con efecto retardado, se producirá.

La crisis climática, pues, es una emergencia planetaria que hay que resolver y, fundamentalmente, es un reto incalculable para nuestra inteligencia moral y emocional.

Se ha de retornar a antiguas prácticas basadas en la simbiosis hombre-naturaleza. Así, es de alabar la tradición de siglos de algunas tribus del Amazonas que entierran los desechos ricos en materia orgánica. Esto redunda, a medio término, en un aumento del nivel de fertilidad de la tierra, con menos contenido de carbono y que, además de mejorar el rendimiento, es el proceso que cierra la secuencia del ciclo del carbono, al volver a integrarse en el suelo.

Es la hora de los biocombustibles: se dan experiencias en Brasil muy provechosas como es la fabricación de etanol como recurso autóctono menos contaminante que los combustibles fósiles.

Se patentiza de un modo alarmante un retroceso en la extensión de numerosos glaciares, en lo que coinciden todas las fotografías que se han venido realizando en los últimos años, que son incontrovertibles.

En un estudio-investigación llevado a cabo por técnicos del Instituto de Física de la Universidad de Berna y de la E.P.I.C.A. (European Project for Ice Coring in Antarctica) se concluye que las mediciones efectuadas dan niveles de concentraciones de dióxido de carbono en la Antártida más elevados y sin precedente, en los pasados 650.000 años de historia de la Tierra.

LA CUMBRE DE COPENHAGUE:

La próxima Cumbre para tratar sobre cambio climático (calentamiento global) de nuestro planeta está previsto que se celebre en la capital danesa, el ya cercano mes de diciembre.

Al Gore está desplegando una inusitada actividad alrededor de este evento. Insiste de “forma machacona” en la necesidad de ir abandonando, de forma gradual y paulatina, el consumo energético de combustibles fósiles (petróleo y carbón) para ir optando e incentivando las tecnologías entorno a las fuentes energéticas renovables: la eólica, la solar, la geotérmica y la biomasa.

El insigne activista ecológico piensa en positivo: la etapa de crisis es una “oportunidad única e irrepetible” para aplicar los remedios adecuados de cara a la sostenibilidad de la vida y del planeta.






ACUSACIONES:

Como es de suponer, Al Gore tiene también sus detractores y enemigos acérrimos, que le prodigan ácidas y nada edificantes críticas. Se le atribuye de utilizar un problema, como va a suceder con el cambio climático, sólo para lucrarse él y su familia. Las averiguaciones en el Fisco son reveladoras: su fortuna personal pasó de 2 a ser de 100 millones de euros en el Ejercicio 2008. El cobro por cada conferencia o acto público a los que es invitado ronda la nada despreciable cantidad de 100.000 euros.

Pero el mayor ataque es el referido a que “predica con un contraejemplo”: en su residencia o mansión consume, según registros, veinte veces más que cualquier familia-tipo de la clase media americana. Y aquí las descalificaciones sí son más encendidas: doble moral, hipocresía, cinismo, poca ética,…





AVISO:

El sábado de esta semana, día 24 de los corrientes, se ha organizado una “batucada” convocada para celebrar el “Día Mundial contra el Calentamiento Global o Cambio Climático”. Bierzo.Natura se adhiere e impulsa la actividad antedicha, apoyando a las Asociaciones y Colectivos que participarán y que nos han invitado a unirnos a ellos: Bierzo Aire Limpio, Ecologistas en Acción, Acción en Red, Asociación de Mujeres del Bierzo,… Animamos, por consiguiente, a todos los bercianos que tengan posibilidad que se solidaricen e intervengan en esta “I Batucada 2009”: por un planeta más saludable.

MARCELINO B. TABOADA